
El protocolo

piel. Empieza con la aplicación de la limpiadora Eve Lom que elimina impurezas y maquillaje, y equilibra el pH cutáneo. Continúa con una mascarilla de parafina, a base de manzanilla, hamamelis y lavanda, que se aplica caliente, y mediante pincel, por todo el rostro. Su temperatura relaja los sentidos, además de la musculatura facial, y sirve para abrir los poros y preparar la piel para una extracción de granitos y puntos negros, sin dejar marcas ni dañar la piel. Tras la extracción se aplica una solución local anti-granitos llamada Dynospot, con propiedades antisépticas y descongestivas, que es la bomba para eliminar los granitos que
nos salen puntualmente. El siguiente paso consiste en aplicar la mascarilla revitalizante Rescue Mask, a base de arcilla blanca y caolín, con propiedades limpiadoras, descongestionantes y desestresantes. Y mientras esta actúa te realizan un maravilloso masaje descontracturante y drenante en cuello, hombros, brazos y manos. Así se eliminan, a través del sistema linfático, todas las toxinas que acumula el organismo. Tras retirar la mascarilla se aplican compresas frías y calientes de manzanilla que calman y suavizan el rostro, y el sérum y la crema de tratamiento indicada según el tipo de piel.
Precio: 100 €.

Veredicto: Es una limpieza profunda, respetuosa con la piel, de la que sales relajada y, lo más importante, sin
marcas ni enrojecimiento. Convierte la tortura china de la limpieza de cutis en una experiencia multisensorial, relajante y súper agradable. Y la piel se oxigena, descongestiona e ilumina. De 10.
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